
Brunswick No.1936 A – Agustín Magaldi & Osvaldo Fesedo & su Orquesta Típica del Tabarís – Tango Mío – 1931
Origen Archivo: Youtube (Antonio Gaspari)
Compositor:Osvaldo Fresedo
Autor: Emilio Fresedo
Fecha de Grabación: 1931
Lugar de Grabación: Buenos Aires
Sello: Brunswick
Disco: No.1936 A
Matriz:
Fuente(s) Información:
Reseña: Osvaldo Fresedo.
Esos primeros arreglos mejor organizados fueron, con todo, bastante sencillos: los músicos se ponían de acuerdo en los ensayos y tocaban luego de memoria o guiándose con una partitura para piano de editorial. En el comienzo de la Guardia Nueva, los arreglos e interpretaciones de Fresedo en 1922 y Cobián en 1923 establecieron un estilo orquestal cuyo rasgo saliente era la clara exposición de la melodía con una cuidadosa y acentuada gradación de matices. El perfil musical de la Guardia Nueva se completó con la variante propuesta por el conjunto de Julio De Caro. Su sexteto aprovechó la experiencia de Cobián y Fresedo, y generalizó el uso de otros recursos tanguísticos. Tradujo el fraseo de
Gardel a la interpretación instrumental, incentivó la “rugosidad” tímbrica dando mayor participación a los bandoneones, que aplicaron recursos específicos (arrastres, lloros, fraseos). La transición de la Guardia Vieja a la Guardía Nueva en el tango.
Observaciones:
Letra:
Cuando sepas que estás lejos, Cuando su canción Llegue a tus oídos. Una angustia habrás tenido, Y sentirás vos Que está muy lejos tu sol. Y si piensas en tu casa, Si recuerdas tus andanzas Por esas calles de Dios... Pensarás en tu Corrientes, Tus amigos, tus parientes Llorarás con su canción. ¡Tango! Tango mío, que llegás al corazón, ¡Tango! Es pedazo de mi tierra, tu canción. ¡Tango! Lejos, cuando se oye tu cantar, A tu lado está otra vez, El amigo que dejás Y estar lejos es un sueño. ¡Tango! Tango mío, cuánta vida ves pasar, ¡Tango! Alegrías y tristezas al vibrar. ¡Tango! Fuiste reo por tu cuna, sí, Por tu lengua, tu caló, Pero te sabés vestir Todo el mundo te entendió. Estar lejos sin amigos, Estar sin amor Hará extrañar tu suelo. Sos el hombre que primero, Sin probar favor Despintará en su ilusión. Cuántos, cuántos corazones, Estrellaron ambiciones En los puentes sin timón... Y al pensar en tu Corrientes, Tus amigos, tus parientes Sufrirá tu corazón.
