
Odeon No.165.979 – Charlo (Chansonnier) & L’Orchestre Argentin Canaro – Misa De Once – 1929
Origen Archivo: Youtube (Mac NOMURA)
Compositor: Juan José Guichandut
Autor: Armando Tagini
Fecha de Grabación: 18/09/1929
Lugar de Grabación: Buenos Aires
Sello: Odeon
Disco: No.165.979
Matriz: 4604
Fuente(s) Información: Discografía Francisco Canaro.
Reseña: Charló.
Nací en La Pampa, en un establecimiento de campo de mis padres, entre Avestruz y Guatraché, y anotado en Puán (provincia de Buenos Aires) donde residían mis abuelos y era el Registro Civil más cercano.
Gardel grababa en Odeon cuando ingresé a ese sello por 1928 y poco después lo conocí. Lo traté poco, tal vez por la gran diferencia de edad. Nos saludamos y nada más. Pero un día él estaba con Razzano en la puerta del Cine Broadway, de calle Corrientes, y yo venía haciendo pinta con un aludo sombrero de color gris, y cual no sería mi sorpresa al oír que Gardel decía a su compañero mientras hacía visera con una mano: «¡Che! ¿Quién es el sombrerudo aquel que viene allí.?»
«Mi sombrero sirvió para que repentinamente, en una cachada original, tomáramos la confianza que entre nosotros no existía. En cuanto a las grabaciones de “Rencor” y “Cobardía” las hizo sin que yo se lo pidiera, después de haberlos estrenado Libertad Lamarque en el Teatro Maipo cuando Amadori, con Botta, era autor de las revistas y director de ese teatro y yo componía música de todo tipo y según las necesidades de esos espectáculos.» TodoTango.
Observaciones: Reimpresión Disco No.4580 A
Letra:
Entonces tú tenías dieciocho primaveras, Yo veinte y el tesoro preciado de cantar... En un colegio adusto vivías prisionera Y solo los domingos, salías a pasear... Del brazo de la abuela llegabas a la misa Airosa y deslumbrante de gracia juvenil Y yo te saludaba con mi mejor sonrisa Que tú correspondías con ademán gentil. Voces de bronce... Llamando a misa de once... ¡Cuántas promesas galanas cantaron graves campanas en las floridas mañanas de mi dorada ilusión!... Y eché a rodar por el mundo Mi afán de glorias y besos Y sólo traigo al regreso, Cansancio en el corazón. No sé si era pecado, decirte mis ternuras Allí, frente a la imagen divina de Jesús, Lo cierto es que era el mundo, sendero de venturas Y por aquel sendero tu amor era la luz. Hoy te dirá otro labio la cálida y pausada Palabra emocionada que pide y jura amor, En tanto que mi alma, la enferma desahuciada Solloza en la ventana del sueño evocador. Misa de once, ¡Yo ya no soy el de entonces! Etc... etc...
