
Gramófono No.AE 3379 – Agustín Irusta & Orquesta Típica Argentina – Misa De Once – 1930
Origen Archivo: Pasionyadmiracionporcarlosgardel
Compositor: Juan José Guichandut
Autor: Armando Tagini
Fecha de Grabación: 06/10/1930
Lugar de Grabación: España
Sello: Gramófono
Disco: No.AE 3379
Matriz: BN 953/1
Fuente(s) Información:
Reseña: Agustín Irusta.
Tiempo más tarde viaja a Buenos Aires donde conoce a Roberto Fugazot y forma un dúo vocal acompañado por Humberto Correa en guitarra (autor del tango “Mi vieja viola”) y graban, en 1926, para el sello Víctor.
Actúa también en Radio Cultura acompañado por Lorenzo Olivari en violín y Carlos Di Sarli en piano. Después conforma otros dúos con Luis Scalon, primero y luego Francisco Graciadío con la guitarra de Genaro Veiga.
En 1926 llega al teatro incorporándose a la compañía de Enrique Muiño e integra un trío, Los tres gauchos, con Alfredo Eusebio Gobbi y Roberto Fugazot.
El pianista Alberto Soifer lo presenta a Francisco Canaro con quien actúa, graba estribillos y viaja a París. El mismo Canaro le propone la formación de un trío junto a Fugazot y el pianista Lucio Demare para tentar suerte en España. TodoTango.
Observaciones: Con estas grabaciones presentadas, por su temática – la mujer, el amor y el desamor, la ilusión y la la decepción, etc.- queremos invitar a que visiten el sitio www.querube.es, dedicado a música de diversos géneros, en general diferentes al tango, como boleros, sones, baladas y otros.
Letra:
Entonces tú tenías dieciocho primaveras, Yo veinte y el tesoro preciado de cantar... En un colegio adusto vivías prisionera Y solo los domingos, salías a pasear... Del brazo de la abuela llegabas a la misa Airosa y deslumbrante de gracia juvenil Y yo te saludaba con mi mejor sonrisa Que tú correspondías con ademán gentil. Voces de bronce... Llamando a misa de once... ¡Cuántas promesas galanas cantaron graves campanas en las floridas mañanas de mi dorada ilusión!... Y eché a rodar por el mundo Mi afán de glorias y besos Y sólo traigo al regreso, Cansancio en el corazón. No sé si era pecado, decirte mis ternuras Allí, frente a la imagen divina de Jesús, Lo cierto es que era el mundo, sendero de venturas Y por aquel sendero tu amor era la luz. Hoy te dirá otro labio la cálida y pausada Palabra emocionada que pide y jura amor, En tanto que mi alma, la enferma desahuciada Solloza en la ventana del sueño evocador. Misa de once, ¡Yo ya no soy el de entonces! Etc... etc...
