Victor No.38001-A – Hugo del Carril & Orquesta – Me Beso Y Se Fué – 1936
Origen Archivo: Youtube (Agujavier)
Compositor: José Canet
Autor: José Canet
Fecha de Grabación: 16/09/1936
Lugar de Grabación: Buenos Aires
Sello: Victor
Disco: No.38001-A
Matriz: BAVE-93334/1
Fuente(s) Información:
Reseña: Hugo del Carril.
Escogido el camino de la canción popular, tomó lecciones con la soprano Elvira Colonese, cantante lírica que encauzó técnica y profesionalmente sus naturales condiciones, comenzando en 1929 a trabajar en Radio del Pueblo. Allí fue estribillista de casi todas las orquestas que desfilaban por la emisora, presentándose ya con el nombre de Pierrot, Hugo Font o Carlos Cáceres. Antes había actuado en un cuarteto de voces junto a Emilio Castaing y Mario y Martín Podestá; luego integró el trío París, y posteriormente formó el dúo Acuña-Del Carril, ya definitivamente adoptado el seudónimo de Hugo Del Carril; grabó por ese tiempo (mediados de la década del 30) una serie de composiciones con la orquesta de Edgardo Donato.
Después comenzó su carrera como solista, cuando el director Héctor Quesada lo llevó a Radio La Nación secundado por guitarristas (posteriormente el acompañamiento guitarrístico lo confió casi exclusivamente a los hermanos Puccio).
En 1936, grabó en discos Victor también como solista, con el marco de la orquesta de Tito Ribero, músico, arreglador y compositor que a partir de entonces se convertiría en su director y asesor musical. TodoTango.
Observaciones: Hugo Del Carril & Orquesta de Tito Ribero?
Con estas grabaciones presentadas, por su temática – la mujer, el amor y el desamor, la ilusión y la la decepción, etc.- queremos invitar a que visiten el sitio www.querube.es, dedicado a música de diversos géneros, en general diferentes al tango, como boleros, sones, baladas y otros.
Letra:
Ayer en un banco de la vieja plaza Que adorna mi pueblo donde yo nací, Comprobé con pena que la vida pasa Que la vida pasa llevándome a mí. Y he tardado tanto para comprenderlo Tuvo que alejarse la que yo adoré, Para darme cuenta que así, sin saberlo Prendida en sus labios moría mi fe. Sentado en el banco Recordé las tardes, En que muy juntitos Tejimos los dos, Un romance ardiente De un cariño sano, Loco provinciano Que soñó un amor. Ella era una diosa Que llegó a mi pueblo, A olvidar su hastío Vencida tal vez, Se arrulló en mi canto Divina y tirana, Y una gris mañana Me besó y se fue. Y he quedado solo, con mis pensamientos En la vieja plaza que me vio crecer, Que escuchó en silencio tantos juramentos Mentiras piadosas de aquella mujer. Cuántos sueños locos, forjó mi embeleso Cuando en su regazo su voz arrulló, Ave pasajera que ansiosa de besos Se posó en mi boca, me besó y partió.