
RCA Victor No.63-0027-B – Edmundo Rivero & Orquesta (Dir.Víctor Buchino) – Desdén – 1950
Origen Archivo: Youtube (agujavier)
Compositor: Carlos Gardel
Autor: Mario Battistella (Mario Batti-Stella Zoppi)
Fecha de Grabación: 21/11/1950
Lugar de Grabación: Buenos Aires
Sello: RCA Víctor
Disco: No.63-0027-B
Matriz:
Fuente(s) Información:
Reseña: Edmundo Rivero.
En esta década ocurrieron, en la vida de nuestro querido artista, dos acontecimientos fundamentales, con dispares resultados. Hacia 1944 es convocado por el pianista Horacio Salgán para participar en su orquesta, en la que estuvo hasta 1947. De este periodo no quedaron registros, ya que los empresarios discográficos le dieron la espalda tanto a la avanzada concepción del tango de Salgán como al inusual registro vocal de Rivero. Ambos se dieron el gusto de grabar en las décadas siguientes, ya siendo artistas consagrados.
El segundo acontecimiento es el que lo lanza definitivamente a la fama, cuando es convocado por Aníbal Troilo para formar parte de su gran orquesta, en reemplazo de Alberto Marino. En los tres años que participó Rivero en la orquesta de Pichuco dejó más de una veintena de grabaciones, en algunas de las cuales cantó a dúo con Floreal Ruiz y con Aldo Calderón. En esta etapa el gran cantor pasó a ser sinónimo de tangos como “El último organito”, “La viajera perdida”, “Yo te bendigo”, pero fundamentalmente del tango de Homero Manzi y Aníbal Troilo, “Sur”. TodoTango.
Observaciones:
Letra:
El día que comparezca Ante el tribunal de Dios, A dar cuenta de mi vida Que me complicaste vos. El día que francamente Tenga yo que declarar, La verdad clara y palpable Que a Dios no puede escapar, Y le diga que faltado A su ley de mala fe, Al hacer de vos mi culto Al amarte más que a Él. ¡Que robé por tu cariño! ¡Que maté ciego de amor! Puede ser que el Dios piadoso Quiera darme su perdón. Desdeñé mi vida entera En la hoguera de tu amor, Esperando lo que fuera... Sin decirte ni siquiera Que es mi pena y mi dolor... Sin embargo, ante el Eterno Será el mismo mi desdén... En mi amor profundo y tierno Por seguirte hasta el infierno ¡Yo despreciaré el Edén! Pero el día de tu “juicio” Yo no sé qué le dirás, Cuando sepas que has pecado Por capricho y vanidad; Cuando sientas la mirada Penetrante de Señor Que te llegará hasta el alma Como un rayo escrutador. Y te acuse tu conciencia Al mostrarte aquel puñal, Que vos misma, tan cobarde Le entregaste a mi rival; Que no contenta con eso, ¡Me mandaste a la prisión! Por más que vos te arrepientas ¡No podrás tener perdón!...
